Por: Lic. Mariano Guerrieri

Desandar los caminos del vasto territorio argentino, es una experiencia que muchos tenemos el agrado realizar, pero moverse en paralelo al extenso Mar Argentino que rompe en olas contra los acantilados y sentir la salada humedad que nos pega en el rostro, no son muchos los afortunados en experimentarlo. La Ruta 3 está abierta a esta sensación.

El itinerario continua dejando atrás la provincia de Río Negro y sus playas caribeñas (https://cpscba.org.ar/turismo-la-cautivante-ruta-3-1-parte/), para ingresar a la provincia del Chubut, en tehuelche “transparencia”, y conocer unos de los Patrimonios de la Humanidad más singulares del país: Península Valdés, santuario de una importantísima fauna marina costera, como la gran ballena franca (Monumento Natural Protegido), colonias de lobos, elefantes marinos y las temibles orcas. Adentrarse en los paseos embarcados y acercarse a los grandes cetáceos, está entre las excursiones más renombradas a nivel mundial.

Unos kilómetros más al sur, la hermosa ciudad de Puerto Madryn se presenta como la “Capital nacional del buceo”, ya que desde finales de los años ´50 se promociona ésta actividad subacuática, con el apoyo de un desarrollado equipamiento hotelero-gastronómico.

Seguimos viaje para sumergirnos en el productivo Valle Inferior del Río Chubut, territorio galés por excelencia de la región y visitar Trelew, con su Museo Paleontológico Egidio Feruglio, uno de los más importantes en su tipo del continente. Y las ciudades de Gaiman o Dolavon, para disfrutar de la tradicional ceremonia del té que inmortalizó Lady Di en su visita por Argentina en 1995. Completa el paseo, la capital provincial, Rawson y Playa Unión para avistar las escurridizas toninas overas, pequeños cetáceos, que parecen diminutas orcas, pintadas en negativo.

Si los pingüinos son nuestra debilidad, en Punta Tombo, la especie “Magallanes”, se reproduce a sus anchas y acompañan al visitante en sus torpes, pero divertidas, caminatas hacia el mar.

El llamado Corredor Turístico “Ruta Azul”, se extiende por unos 700 km y es el momento en que la Ruta 3, se desarrolla pegada al mar. Pudiendo encontrar, pintorescos atractivos a largo de su derrotero, como ser, la ciudad de Camarones y el museo de Juan Domingo Perón, Bahía Bustamante y el Parque Marítimo Costero Patagonia Austral, ambos, santuarios de aves costeras migratorias. Por último, la pujante ciudad de Comodoro Rivadavia, lugar donde se extrajo por primera vez petróleo en suelo nacional en 1907 y el bullicioso balneario de Rada Tilly, el último de la costa argentina.

Ya en territorio santacruceño, la Ruta Azul continúa por Caleta Oliva y su monumento al Gorosito (trabajador petrolero). Luego, el desvío hacia Puerto Deseado, para admirar un accidente geográfico único en Sudamérica, la Ría Deseado (“ría”, río que abandonó su cauce y fue reemplazado por el mar), compone un estuario  de gran riqueza geográfica y faunística que impresionó a Charles Darwin en su paso por tierras argentinas en 1833.

Siguiendo dirección sur, la ruta nos comunica con el Parque Nacional Bosques Petrificados de Jaramillo, creado para proteger un vasto territorio de flora fósil, testimonio paleontológico de que estas tierras fueron, hace millones de años, un frondoso bosque de araucarias, antes del surgimiento de los Andes. Luego, el desvío hacia Puerto San Julián, para visitar la réplica del Nao Victoria, embarcación en la que se dirigía Hernando de Magallanes en su viaje alrededor del mundo en 1520 y ancló en la zona.

El Gran Bajo de San Julián nos sorprende en el camino con la Laguna del Carbón, con – 107 msnm, constituye la depresión más profunda del continente. Y, ya casi al final de la ruta continental, nos encontramos con el primer parque nacional costero Monte León, que protege una zona prácticamente virgen del ambiente patagónico marítimo/costero, para luego dar paso, no sin antes esquivar las tropillas de guanacos que se cruzan por el camino, a la ventosa ciudad de Río Gallegos.

En este punto, el periplo hace una inflexión porque debemos cruzar el Estrecho de Magallanes, así que nuestra ruta desaparece para dar paso, luego de los trámites aduaneros correspondientes, a los caminos chilenos y viaje en balsa de por medio, volver a suelo firme en la isla grande de Tierra del Fuego.

Ya en continente insular, unos kilómetros más por territorio Chileno, para desandar nuevamente la fascinante ruta 3. San Sebastián, es el primer enclave nacional, frente al inmenso golfo del mismo nombre, y  tomando rumbo sureste, diferentes estancias dedicadas a la cría de ovejas y al agro turismo como la famosa María Behety, se nos presentan en la basta estepa.

Siguiendo el camino, la misión Salesiana Nuestra Señora de la Candelaria, pionera en la isla con la idea de civilizar a los nativos Selknam y protegerlos de los buscadores de oro,  da paso a la ciudad de Río Grande, pujante enclave petrolero y zona de pesca deportiva.

A partir de este momento, la estepa deja su lugar al bosque de transición y la ruta se torna ondulada y peligrosa en invierno. Así, asfalto nos lleva a la pintoresca Tolhuin (“corazón”, en lengua fueguina), lagos Fagnano y Escondido, hasta el Paso Garibaldi, que con 450 msnm permite traspasar la Cordillera de los Andes. Cordón montañoso dispuesto ahora de este a oeste, convierte a nuestra ruta, en la única carretera argentina que al cruzarlo, sigue en territorio nacional.

El centro de esquí más austral del mundo “Cerro Castor”, y el Valle de los Huskies, con sus famosas turberas, son la antesala a la ciudad de Ushuaia, y su bellísima postal frente al Canal del Beagle.

El final de nuestro itinerario está cerca, sólo restan transitar 23 km rumbo oeste entre bosques de legas y guindos,  testigos del paso del tren de presidiarios que dieron origen a la ciudad a finales del siglo XIX, y frente a la Bahía Lapataia, encontrar el famoso cartel de vialidad que nos indica que llegó a su fin la Ruta Nacional N° 3, habiendo recorrido 3.079 km desde Buenos Aires y a 17.848 km de Alaska en el extremo norte continental.

Seguramente en la bitácora del  viajero trashumante, el derrotero de la Ruta Nacional N° 3, resalta entre los demás caminos por recorrer. Es nuestra, es argentina, a disfrutarla.

Apunte de viaje: El Departamento de Turismo de la CPS realizó varias salidas grupales en las cuales se pudieron conocer varios de los destinos detallados en la nota en las provincias de Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego.